Rosacea

Rosacea
Que es la Rosácea

La Rosácea es una enfermedad crónica que afecta la piel de la cara causando enrojecimiento en zonas como las mejillas, naríz, frente, mentón y ocasionalmente también en cuello y pecho.
Existen diferentes tipos de Rosácea, la más leve se presenta como un rubor permanente y se pueden apreciar los vasos sanguíneos en forma muy notoria.
Otro tipo de Rosácea presenta el clásico enrojecimiento pero con la aparición de protuberancias o granos rojos que pueden llegar a formar pústulas.

También está la Rosácea que se caracteriza por un engrosamiento de la piel, especialmente de la naríz, llegando a causar deformaciones a nivel facial, este tipo de Rosácea es más común en hombres que en mujeres.
La rosácea también puede afectar los párpados y el interior del ojo siendo de caracteríasticas similares a una conjuntivitis.

Esta enfermedad puede causar ardor, picazón, sensaciones quemantes y diversas molestias.
Puede ser confundida en algunos casos con otras afecciones cutáneas, especialmente con acné o dermatitis seborreica, algunas veces la Rosácea está acompañada por alguno de estos problemas lo que dificulta aún más su diagnóstico.

Causas de Rosácea

No se conocen las causas de esta enfermedad, se conoce que afecta a personas de piel muy blanca entre los 30 y los 60 años y que tiene un componente hereditario ya que por lo general existen otros miebros de una misma familia que padecen rosácea.
Pero esto no es excluyente ya que la rosácea puede aparecer aún sin que haya ese factor hereditario.

Factores que empeoran la Rosácea

Las temperaturas extremas, demasiado frío o calor.
El alcohol.
Las comidas picantes.
El café.
Bebidas o comidas muy calientes.
Las cremas con corticoides.
Algunos productos cosméticos.
El sol.
El estrés.
La Ansiedad.
Los estados nerviosos.

Cura para la rosácea

Como mencionamos al comienzo la Rosácea es una enfermedad crónica para la que no existe una cura específica pero puede responder muy bien a diversos tratamientos que serán de acuerdo al grado de la afección.
Existen tratamientos con antibióticos por vía tópica y oral, en algunos casos se puede recurrir a la cirugía, también pueden dar muy buenos resultados los tratamientos con láser.